Cualquiera que haya nacido en Puerto Rico, que tenga descendencia Puertorriqueña o que haya sido adoptado por la comunidad como un boricua.​

Es un bembé Navideño y la excusa perfecta para invadir la casa de alguien a medianoche con panderetas, güiros y maracas, y no parar hasta que te den de beber.  Si no, lloras.  - Ver Asalto.

​El aguinaldo es un término que adoptamos en Puerto Rico para llamarle a las canciones de Navidad.

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También, es el regalo de apreciación (usualmente son chavos) que damos a las personas que nos ayudan durante el año.  Es un gesto de generosidad Navideña.

La Navidad Boricua es una temporada completa que comienza en noviembre y termina a finales de enero con las Fiestas de la Calle San Sebastián.

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Es una mezcla de cultura, música, familia, y mucha alegría donde se canta, se come y se comparte hasta altas horas de la noche. Aquí la magia Navidad de la Navidad Boricua la siente todo el mundo.

La joya culinaria de las Navidades. Los pasteles, hechos de masa de guineo y rellenos ricura boricua son lo que te mantienen vivo durante la temporada. "Navidad sin pasteles no es Navidad."  Ahora el debate de "con ketchup o sin ketchup" es casi causa pa' un plebiscito.

El chinchorreo es un arte y un estilo de vida.  Consiste en irte de janga con los panas, de chinchorro en chinchorro (kioskos de comida tradicional), tomando cerveza y comiendo frituras y delicias puertorriqueñas.  

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El Chinchorreo es el pasatiempo nacional de Borinquén.

El asalto navideño en Puerto Rico es una tradición festiva que se celebra durante la temporada navideña. Consiste en una parranda o trulla donde grupos de amigos y familiares se reúnen para cantar aguinaldos, compartir comida típica y celebrar juntos - y te sorprenden tarde en ola noche o la madrugada. Esta celebración refleja alegría y el espíritu de la Navidad en la isla, creando un ambiente de camaradería y felicidad.

Es un momento especial para disfrutar de la cultura puertorriqueña y fortalecer los lazos sociales.

La sopa que te salva después de una parranda o una Nochebuena intensa. Es el remedio boricua para revivir el cuerpo después de un desvelo Navideño.  ¿De qué está hecho? De todo lo rico de nuestra cocina Boricua, y en caso de que te haya sorprendido la trulla, de lo que tengas disponible en la nevera.